"La reestatización de Aerolíneas Argentina es otro desastre".

El candidato a diputado por la Unión Pro bonaerense, Felipe Solá, fue muy crítico con el pasado privatizador de Néstor Kirchner, le recomendó ser “más humilde” y admitió que la reestatización de Aerolíneas “era lo único” que podía hacerse, pero no algo que deba aplaudirse.

Tras una recorrida por diversos barrios de San Fernando y en diálogo con NCN, Solá dijo que cuando se habla de privatizaciones “hay que tener memoria”.

Así, recordó que “Néstor Kirchner privatizó el Banco de Santa Cruz; hizo un gran lobby para que se privatizara -dando un gran subsidio a los nuevos dueños- Yacimientos Carboníferos Fiscales y también hizo lobby (como presidente de los estados federados productores de hidrocarburos) para la privatización de YPF”.

En aquella oportunidad, muchos diputados peronistas se negaban no solo a votar el proyecto privatizador sino, incluso, a dar el quórum necesario. En tales circunstancias, recordó Solá, el entonces diputado Rafael Flores (PJ de Santa Cruz) se hallaba con un pie enyesado, situación que aprovechó para no asistir a la Cámara el día que se trataba el proyecto.
“Pero Kirchner le puso el avión de la gobernación para que (Flores) no tuviera excusas y así se reuniera el quórum necesario para tratar y aprobar la privatización”. Por cierto, y aunque el diputado Flores votó en contra del proyecto menemista (“del que Kirchner había dicho varias veces que era un proyecto de transformación que él apoyaba”, rememoró Solá), con su presencia en el recinto se logró el número requerido para iniciar la sesión.

“De modo que hay que ser más humilde”, manifestó el candidato, quien a continuación opinó también sobre los fondos previsionales.

“Creo que entre privatizarlos o no, fue mejor la privatización. En todo caso –prosiguió-, yo prefería que se respetaran las cuentas individuales –un proyecto que hicimos con Roberto Lavagna- de aquellos que decidieron permanecer en el sector privado aún después de haber podido optar por volver al Estado”.

Seguidamente, y marcando una leve pero importante diferencia con su compañero lista Francisco De Narváez, el ex gobernador bonaerense se refirió al caso Aerolíneas: “Nadie puede haberse enorgullecido de su privatización, pero tampoco puede enorgullecerse de su reestatización.

Porque la privatización fue un desastre –no hubo control, la empresa fue vaciada dos veces por el grupo Marsans, un hecho indefendible, un modelo de latrocinio-.

Ahora, la reestatización es otro desastre. Claro que era lo único que podía hacerse al ver que la Argentina se quedaba sin aerolínea de bandera y sin vuelos de cabotaje. Está bien: era lo único que se podía hacer y se hizo; yo voté a favor. Pero no puedo estar orgulloso de eso”.
xxzxx
Fuente

Notas Relacionadas:

De campaña por San Fernando: Felipe Solá
Caminata por Gran Bourg
Solá dijo que ganará en los próximos comicios y qu...
La causa de la casualidad.